El carácter de las obras de Danny Elfman se ajustan a la perfección a películas de animación destinadas a público infantil. De hecho, es su cuarto trabajo dentro del género después de Decubriendo a los Robinsons, La novia cadáver y Frankenweenie. Esta última, también realizada para Blue Sky, los estudios que ha creado Epic.
En términos generales se puede decir que la música de Elfman funciona. Tiene ese carácter “épico” que le hace falta a la cinta, y no sólo por el título. De hecho, es en esos momentos épicos donde alcanza su mejor factura. Comienza con entusiasmo en “Leafmen”, presentándonos lo que podría ser el primero de los dos temas más importantes de la banda sonora. En rigor habría que decir que no hay un tema principal que haga de hilo conductor de la película, pero sí será un tema recurrente sobre todo en los momentos en los que predomina la acción y en la conclusión con “Epic Finale”.
Desde el principio destaca el uso de giros musicales e instrumentación de lo que podríamos llamar “música celta”. Es algo que ya se ha instaurado como moda en películas de este calibre. Me vienen a la memoria, por ejemplo, el trabajo de John Powell para Cómo entrenar a tu dragón (aunque la acción se desarrollaba en tierras vikingas) o la más adecuada Brave de Patrick Doyle. Las tres muy similares en cuanto a su concepción, aunque no en su desarrollo.
Dentro de tanto entusiasmo y energía se agradece que haya algún momento para la calma con un toque de misterio en “Tara’s Chamber” y el rincón reservado para la magia en “Tara’s Gift”. Pero, posiblemente, la más bonita sea “The Selection”. Un corte que termina de desarrollar el segundo (y último) tema destacable de la partitura.
Pero quizá el territorio más genuinamente de Elfman lo encontramos en “Epic Final Confrontation” y en “Return”. Dos piezas cargadas de dulzura y jovialidad donde destaca el sonido de la cuerda (muy recurrente en el caso de la guitarra acústica) y que recuerdan, en cierto sentido, a la Campanilla de Joel McNeely.
Una composición, en fin, que funciona muy bien y contiene momentos realmente destacables. Especialmente según nos acercamos hacia el final de la grabación. Sale ganado en la comparación con la similar Oz, una de sus composiciones más recientes. No mejora, sin embargo, otras bandas sonoras equivalentes dentro del género de la animación. Aunque sí cabe destacar que el uso que hace de los coros es considerablemente mejor que el resto. Es la marca de la casa.
Sólo como apunte final, aquellos que esperen escuchar a Beyoncé Knowles y su interpretación de “Rise Up” se tendrán que quedar con las ganas, porque no está incluida en el disco.
Francisco Arellano Codesido
Ficha técnica:
(Epic, EE.UU., 2013)
Compositor: Danny Elfman
Sello: Sony Classical
Duración: 51min.