La maternidad y la vida triunfan en el Festival de Cine de Málaga
Premio Signis para Los días que vendrán y mención especial para Yo niña
Con una selección oficial algo cuestionable, el Festival de Cine de Málaga de este año ha premiado la cinta catalana Los días que vendrán con la biznaga de oro a la mejor película y a la mejicana Las niñas bien como la mejor película latinoamericana. Pero hagamos en un pequeño repaso a las mejores propuestas del Festival.
La tecnología nos ha hecho más reactivos y acelerados en nuestra vida diaria, hemos perdido serenidad y muchas veces cabalgamos de emoción en emoción sin ser dueños de nuestros propios caminos. La película argentina Aire, del director Arturo Castro nos muestra a una madre desbocada ante un accidente que sufre su hijo, con síndrome de Asperger; una serie de acontecimientos le harán entender que la vida es aún peor si nos empeñamos en vivirla solos. Con una segunda parte algo alargada, Aire resulta muy interesante por el uso que hace del sonido, al incorporarle “asma” a la madre, y por la tensión que genera durante toda la película.
Por otro lado, tenemos la película Las niñas bien, un interesante ejemplo del desmoronamiento social y personal, que sufre un matrimonio millonario al perder de repente todo lo que tiene. Curioso cómo es el marido, el que toca fondo, quien recupera una ternura en la mirada propia de una humanidad escarmentada. También en México en los años 80, se produjo una especie de desmoronamiento social, cuando se vivieron las consecuencias de la revolución del Mayo del 68: libertad sexual, drogas y una ausencia de cualquier autoridad (ni padre, ni Estado ni Dios); todo esto muy explícitamente contado en la sórdida y turbulenta Esto no es Berlín.
Pero si hay un tema que atraviesa todo el Festival sería el de la mujer, la maternidad y la vida. Películas como La niña errante, Yo niña, El despertar de las hormigas o Los días que vendrán nos presentan historias protagonizadas por mujeres, dos de ellas niñas, cargadas de enorme belleza y autenticidad. Los días que vendrán, ganadora de la biznaga de oro a mejor película, del premio del Jurado Joven y del premio Signis, nos cuenta la historia de una pareja que, sin querer ser padres, descubren cómo un embarazo les puede cambiar la vida. Una mirada íntima casi documental de la maternidad rodada mientras sus protagonistas, David Verdaguer y Maria Rodríguez Soto, esperaban su primera hija en la vida real.
Por todo lado, la película argentina Yo niña, dirigida por Natural Arpajou, nos transmite con elegancia y sencillez la trascendencia; con una niña como protagonista que mira al cielo esperando el amor que necesita y anhela. Interesante también la valentía de la película Litus por afrontar el tema del suicidio que, aunque sea con estructura teatral, consigue adentrarse en un tema tabú que muchos silencian. La producción valenciana La Banda transmite con elegancia formal una historia de iniciación y búsqueda personal agradable y bien concluida. Y además recoge con sencillez y respeto, la tradición española de las bandas de música; historia y cultura de este país. Y, por último, Staff Only o el florecer de la conciencia y Buñuel o el laberinto de las tortugas; una muy digna producción de animación que convence y entretiene.
En definitiva, un Festival de cine cargado de propuestas donde la mujer, la maternidad y la vida terminan coronándolo todo. Estaremos atentos al estreno de cada una de estas películas para seguirlas con interés y muy de cerca.
Recuerdo que de niño me apasionaba el cine: “Los Goonies”, “E.T.” o “James Bond”. Siempre quise ser director de cine con mi propia productora. Hoy soy empresario pero también puedo de escribir de cine en Pantalla 90, La Voz de Almería o Aleteia. Descubrí hace unos años lo bonita que es la radio y cada semana hablo en Cadena Ser Poniente en Almería. Pero lo que más me gusta es transmitir esta pasión, en la Universidad de Almería dando clases o siendo Jurado en Festivales de Cine como San Sebastián o Málaga. Amo el cine porque me lanza a vivir; si aprendes a mirarlo se convierte en una escuela para la vida. Siempre le estaré eternamente agradecido.