Crítica
Público recomendado: +14
Bajo el paraguas protector de Steven Spielberg, Tom Hanks y Gary Goetzman, John Orloff adapta la novela de Donald L. Miller, titulada Los amos del aire. Se entiende que esta sería la serie que completaría la trilogía del universo Spielberg sobre la Segunda Guerra Mundial, tras la sobresaliente Hermanos de sangre y la notabilísima El Pacífico. La diferencia con las anteriores es que ésta se centra en las hazañas bélicas de los estadounidenses en el cielo alemán con sus famosos bombarderos B-17, auténticas fortalezas aéreas, que inspiraron a George Lucas para la creación del mítico Halcón Milenario de La Guerra de las Galaxias.
Esta miniserie de nueve capítulos de sesenta minutos de duración ha sido dirigida por varios cineastas como suele ser habitual, dependiendo de la carga dramática que se quiera transmitir en cada uno de los episodios. Esta producción es bastante buena, pero podría dividirse en dos actos: el primero más reiterativo en la que vemos la rutinas de los militares y los pilotos, así como una gran cantidad de batallas aéreas que se presenta, mientras que los cinco últimos episodios, donde vemos las luces y sombras de la guerra, se desarrollan bastante mejor el perfil de los personajes y conocemos sus motivaciones. El resultado es satisfactorio por lo bien llevada que está la trama, reflejando el sacrificio de muchas personas, y por un presupuesto espectacular de 250 millones de dólares con lo que adornar la historia, pues se cuida hasta el último detalle de la ambientación histórica. Este entretenido producto televisivo es un homenaje entre otros al género bélico como a La gran evasión, protagonizada por Steve McQueen.
Los amos del aire invita a pensar sobre el uso de la legítima defensa cuando “personajes” como Hitler se intentan adueñar del mundo a toda costa, aunque hay militares poco partidarios de bombardear a la población civil alemán porque les supone un dilema moral. Hay un diálogo interesante y brillante en la que unos judíos que han sufrido las terribles consecuencias de vivir en un campo de concentración se preguntan dónde estaba Dios en esos momentos, mientras que en sentido más esperanzador vemos a otros militares que se encomiendan a Jesucristo cuando entran en combate de modo personal o mediante un capellán castrense que reza con ellos. A través del oficial de la triple R Robert “Rosie” Rosenthal vemos que hay una referencia al síndrome de estrés postraumático como consecuencia de muchos días de combate, que descolocaba a los militares, donde los vemos perdidos cuando tienen que volver a la vida civil o para descansar
Por otra parte, aunque esta historia refleja la camaradería de los militares cuando se juegan la vida, lo más interesante o atractivo de esta serie es la relación que se establece entre la doble B en lo que se entiende que es un homenaje a estos militares (como pudo haber sido Buck Danny, una serie de tebeos creados por Jean-Michel Charlier y Victor Hubinon). La historia de profunda amistad y un poquito de suerte entre Austin Butler, que guarda un parecido con Val Kilmer como Buck y Calum Turner en el papel de Bucky invita a la reflexión sobre ese querido valor que todos apreciamos tanto cuando todos sabemos que los amigos se pueden contar con los dedos de una mano y a lo mejor te sobran dedos.
Tampoco nos podemos olvidar de los escuadrones de pilotos afroamericanos, que eran tratados como soldados de segunda, negando los ascensos por su condición racial cuando los nazis perseguían judíos; aun así estos militares negros pensaban que su país era él que mejor los trataba, a pesar de las diferencias. Se percibe como algunos militares blancos hacen un esfuerzo por integrarlos en un sentido positivo.
Con respecto a los oficiales alemanes los que pertenecen a la Wehrmacht son mostrados con elegancia y con los valores de los militares de cualquier ejército, mientras que los que pertenecían a las SS se les ha dado un matiz más negativo con toda la razón del mundo.
Víctor Alvarado
Víctor Alvarado es Maestro de Educación Primaria e Infantil y Licenciado en Psicopedagogía. Máster en Publicidad. Suficiencia Investigadora de doctorado de Psicología del Deporte. Estudios de Teología en el Instituto San Pablo. Cursos de radio y televisión en la Universidad Pontificia de Salamanca. Tiene una larga experiencia en educación. Dirige el programa de radio, Directo a las Estrellas, en Intereconomía (Castilla y León) y Radio Ya. Ha colaborado en Radio Inter y Esradio. Crítico de cine en Pantalla 90, Diario Ya y Páginas Digital. Es miembro del CEC.
Esta es su web: www.cineylibertad.com y, lleva más cerca de 10 años como bloguero de Cope, donde analiza el cine, los cómics y los libros desde una óptica antropológica y axiológica, atendiendo a todas las dimensiones del ser humano.