600 millas

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Movie Details

Título original
600 Millas
Director
Gabriel Ripstein
Géneros
Suspense, Drama
Sinopsis
Arnulfo Rubio (Kristyan Ferrer) es un joven de Sinaloa que está implicado en el tráfico de armas de Estados Unidos a México. Por su parte, Hank Harris (Tim Roth), un veterano agente de la ATF, lo vigila desde el otro lado de la frontera. Un incidente mínimo hace que los dos entren en contacto y vayan juntos a un lugar muy peligroso. Aunque son enemigos, durante el largo viaje se darán cuenta de que quizá el único modo de salvarse será confiar el uno en el otro.
País
 United States of America,   Mexico
Duración
1 h 25 min
Estreno
3 diciembre 2015
Certificación oficial
Reparto
Tim Roth, Kristyan Ferrer, Harrison Thomas, Mónica del Carmen, Craig Hensley, Julian Sedgwick, Tad Sallee, Noé Hernández, Harris Kendall, Greg Lutz, Cale Rush

Crítica:

Público recomendado: Adultos

El sol abrasador y el polvo en suspensión son los protagonistas en la frontera donde solo alguna vegetación reta el entorno yermo en el que parece haberse suspendido el tiempo.

Los únicos que se mueven en este paraje estático son el joven mexicano Arnulfo Romero y el policía Hank Harris, unidos involuntariamente para recorrer 600 millas y enfrentarse a los capos de la droga de Sinaloa (México). Es el estreno tras la cámara de Gabriel Ripstein, hijo y nieto de gente del cine, para firmar la película 600 millas.

Arnulfo Rubio (Kristyan Ferrer: El narco, Días de gracia, Las horas muertas…) acaba de empezar en el contrabando de armas desde Estados Unidos a México. En el país centroamericano, las recibe su tío, quien se ocupa con su organización de darles salida entre mafiosos. Tras comprar la “mercancía”, a Romero le sorprende, Hank Harris (Tim Roth: Selma, El fraude, Matar a un rey…), agente del gobierno norteamericano, que a su vez le pilla desprevenido el compinche estadounidense del joven mexicano.

A partir de aquí, Hank será primero prisionero de Romero y luego “socio” durante 600 millas, distancia que deberá cubrir porque cree —o quiere creer— ingenuamente que el policía puede ayudar a su tío por los contactos que tiene en México.

Basado en hechos reales, aunque no en los personajes que intervienen en la cinta, hubo un operativo en México en 2009 (descubierto en 2011), que permitía el contrabando de armas, su venta a criminales y su paso a tierras mexicanas con la aprobación de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos de Estados Unidos (ATF, por sus siglas en inglés). Ocurrió bajo el pretexto de rastrear armamento para dar con los responsables del tráfico de drogas del lado mexicano.

En 600 millas, que obtuvo un premio en el festival de cine de Berlín y que representó a México en los Oscar 2015, asistimos al ambiente criminal que subsiste en México y que se ha agravado en los últimos años con el pulso al Estado por parte de la delincuencia organizada. Delincuencia que se ramifica también en el Ejecutivo mexicano. Este clima parece arrasarlo todo y afecta también a las relaciones familiares más cercanas, como le ocurre a Romero con su madre.

En el contexto familiar se reproducen también esos vínculos delictivos y parece no haber salida. Es una auténtica “escuela” donde las nuevas generaciones deberán perder la inocencia para obedecer “la llamada de la sangre”; eso o morir. Matar o ser matado parecer ser el dilema.

Ripstein, también guionista, acentúa estos aspectos para lo cual “desnuda” la historia de tramas secundarias, de estudios psicológicos de personajes y de puntos de giro. Estos elementos se dan, pero en pequeña proporción y algunos de ellos son verdaderamente impactantes. Cuando suceden, hacen remontar la narración, en ocasiones demasiado parsimoniosa.

Como en otras de sus películas, Tim Roth se muestra resolutivo y mantiene un personaje que actúa lacónica y contundentemente cuando requiere la ocasión, como sucede en alguien que está en una tierra demasiado hostil, que todos —de una y otra parte de la frontera— han “cultivado” durante muchos años para que dé esos espeluznantes “frutos”.

Con todo, Harris-Roth tiene un gesto de afecto con su transitorio “compañero” Romero. Y con eso también nos quedamos.

 

 

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