Crítica:
Público recomendado: Mayores de 7 años
Interesante western de Blake Edwards que no se prodigó en este género pero al que le aporta algunas de las características de su género tales como las historias de perdedores, conscientes de sus propios infiernos de los que tratan de salir victoriosos. Las reminiscencias estéticas beben más del estilo de Peckincpah que de Ford al tiempo que combina pequeños toques de comedia, género en el que Edwards fue un verdadero maestro. El maravilloso reparto contribuye a engrandecer sus poderosas imágenes además de indagar en la bellísima historia de amistad que une a los dos protagonistas. Una gran película.