El fundador
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Crítica:
Público recomendado: jóvenes-adultos
Atención: esto es serio. John Lee Hancock, el director de Al encuentro de Mr. Banks y The blind side-Un sueño posible, nos presenta en este 2017, un biopic sobre el hombre que creó la franquicia McDonald’s y la exportó a todo el mundo.
Un biopic sobre uno de los hombres más ricos del planeta y una de las cadenas más amada y odiada, al mismo tiempo. Un biopic sobre la cadena de fastfood que alimenta cada día al 1% de la población mundial. ¡Un nuevo “poderoso caballero es don Dinero”: adelante con El fundador!
Michael Keaton (Birdman, 2014; Spotlight, 2015) interpreta a un desafortunado Ray Kroc, un vendedor ambulante de batidoras que no consigue vender ni una sola, un loser en toda regla. Un loser de los que ya hemos visto en miles de pelis; sin embargo, su suerte cambia cuando, al compás del mantra que le da fuerzas Piensa en positivo, decide viajar hasta San Bernardino (California) para ver de primera mano cómo trabajan los hermanos Mac y Dick McDonald, que regentan un negocio familiar centrado en ofrecer el mejor servicio en el menor tiempo posible. Gratamente sorprendido por la rapidez de la hamburguesería y por haber descubierto a los “Ford” de la comida rápida, ve en el negocio de los arcos dorados una idónea ocasión para enriquecerse.
No obstante, el director no pretende en ningún momento vendernos una historia mágica y perfecta; sino, poco a poco, mostrarnos la vida de un hombre que cumple a rajatabla el ideal del sueño americano: Kroc es el self made man, el hombre que a base de esfuerzo y sudor consigue llevar adelante su vida y construir un imperio; el hombre con un olfato desarrollado para los negocios y aquel que consigue triunfar en la vida, el winner. Esta es una película inteligente –no crean que es servil- y que permite al espectador ver y entender qué genera una vida obcecada en el dinero, en el propio ombligo: un matrimonio roto, un negocio familiar expoliado y la conquista económica del mundo. Pero, gracias, al cielo, sin moralina alguna: sencillamente se nos narra una buena historia. Véanla y disfruten de El fundador.
