Crítica
Público recomendado: Todos
Asegura Jesús García Colomer que nunca había hecho cine, pero en absoluto parece un primerizo, pues ha sabido cogerle con mucho temple el “aire cinematográfico” en su primer largometraje: Hospitalarios, las manos de la Virgen, un documental sobre los voluntarios y discapacitados que van a Lourdes a encontrarse con la Virgen.
«He ido 16 veces a Lourdes, porque tengo una relación con la “Señora”», desvela Antonio Gordo, uno de los protagonistas de esta cinta que lleva en silla de ruedas muchos años. A la Virgen, ya no le pide la curación, porque asegura que Ella le ha hecho el milagro más grande: «¡Me ha curado el alma!».
El documental empieza con un prólogo muy sugerente, en el que García Colomer, también guionista junto a Victoriano Rubio, enfatiza la importancia de formar equipo. Para ello, utiliza una voz en off femenina y van apareciendo imágenes de equipos de baloncesto, rugby, ciclismo y otros, lo que confiere a este documental una originalidad y un dinamismo no visto en este tipo de documentales religiosos.
Este prólogo le sirve para realizar un parangón con los equipos de voluntarios que atienden a los discapacitados en sus viajes a Lourdes, que ya cuenta con más de 60 años de peregrinaciones a la gruta de la Virgen en Francia.
En los algo más de 80 minutos, por Hospitalarios van desfilando voluntarios y discapacitados para contar sus experiencias, con un ritmo muy ágil y dinámico. García Colomer, autor, entre otros, del libro Que hace una chica como tú en un sitio como este (una joven que se mete a monja en un monasterio), enfatiza los testimonios más jugosos, los de Gordo y otros compañeros discapacitados, y su filme es una guía bastante ajustada a los trabajos de voluntarios y personal de apoyo a los discapacitados.
Aunque solo aparece en algunos planos, Basilio es habitual en estas peregrinaciones (lleva 25 hasta la fecha) y es uno de los voluntarios. Acogido hace varias décadas en la casa de las hermanas de Santa Teresa de Calcuta para recuperarse de la droga, Basilio se curó y todos los días atiende (levanta, lava, da el desayuno…) a las personas que viven en la dependencia que ellas tienen en Madrid, en la C/ Ermita del Santo.
La película es un producto muy digno y llevado con ligereza y buena mano por este director, Jesús García Colomer, que junto con el resto del equipo ha sabido ponerle rostros y palabras a los enfermos y a las personas que los acompañan y atienden.