Crítica:
Público recomendado: Todos
Secuela del popular spgahetti western Le llamaban Trinidad con que Bud Spencer y Terence Hill terminaron por rubricar su éxito y popularidad. La cinta, que tiene todos los ingredientes del spaghetti, no está exenta, además, de ese tono de humor gamberro que hizo de la pareja un binomio único en el género. La poca catadura moral de sus personaje no logra ensombrecer el hecho de que resultan simpáticos y entra ñables para el espectador. Sus actos reprobables no logran nublar el hecho de que Trinidad y Bambino tiene un gran corazón.