Crítica
Público recomendado: +16
Película estrenada en plataformas
A veces me pregunto cómo sería trabajar como crítico de cine en uno de esos grandes medios de Estados Unidos. Con frecuencia, los grandes estudios de Hollywood suelen invertir suculentas sumas de dinero en publicidad. Esto suele provocar que esté técnicamente prohibido hablar mal de determinados estrenos. No se muerde la mano de quien te da de comer y esto en los medios de comunicación también es así. ¿Por qué creen que todas las películas que estrena Disney suelen recibir críticas entusiastas? Lo de menos es que sean buenas.
Me pregunto qué habría dicho yo si, por ejemplo, tuviera que decir cosas buenas de una película como Mal de ojo, el último estreno de cine de terror de Amazon Prime. Sin tener que mentir podría decir que el film de Elan Dassani y Rajeev Dassani es una película formalmente impecable. Esto se suele decir cuando una cinta básicamente se ve y se oye bien. Había medios para contar lo que se quería y además se destila cierto preciosismo en su puesta en escena. Esto molestará a algunos, pero puede que atraiga a otros. También tiene a su favor que el film está basado en un relato “audible” (esto más que a su favor, es un tanto singular) de la escritora de origen indio Madhuri Shekar y que a su vez está dirigido por dos hermanos gemelos también hindúes, Elan Dassani y Rajeev Dassani. Esto provoca que Mal de ojo resulte un film con elementos verdaderamente indios sin que uno piense que han sido filtrados por la maquinaria de Hollywood. Es decir, todo es muy indio y esto de vez en cuando es bueno en una película al uso como esta.
Sin embargo, hasta aquí podemos dejar de decir cosas. Supongo que de haber trabajado en un gran medio de Hollywood habría escrito una crítica de párrafo y medio. Resulta que los hermanos Dassani son en realidad dos cineastas formados en el aparataje de los efectos especiales para series de televisión, sector en el que llegan trabajando desde hace más de una década. Es por esto que llame la atención que sus responsables se decidieran por una película tan poco efectista y tan aparentemente dramática. Uno podría pensar que esto es bueno y en efecto lo sería si detrás hubiera un guionista competente y un director, o dos, conocedores del material que tienen entre manos. Puede que por todo esto Mal de ojo sea una película más aburrida que mala. Es decir. Podría ser peor película eso es cierto, pero no creo que pudiera ser más aburrida.
Lo curioso de todo esto es que calificar una cinta como Mal de ojo como una película de terror sea, de entrada, una apuesta que no está exenta de riesgo. Es el peligro de las clasificaciones y de los empaquetados. Es posible que en esencia Mal de ojo tenga todos los ingredientes para ser considerada un telefilme de terror, pero ni da miedo ni nada parecido. La otra opción es que hubiera sido un buen drama empapado de cierta atmósfera de terror, pero es que tampoco lo es.