Crítica

Público recomendado: + 16

Cerrada en sus 21 puentes, de ahí el título inglés de 21 Bridges, la isla de Manhattan se prepara para acorralar a unos atracadores que han matado a varios policías en su huida. El director de televisión irlandés Brian Kirk realiza su segundo largometraje, tras Middletown, y una carrera en distintos capítulos de series de televisión, como Los Tudor y otras estadounidenses como Dexter y Boardwalk Empire. También dirigió el telefilme My Boy Jack, protagonizado por Daniel Radcliffe.

Hijo de policía asesinado, al detective Andre Davis (Chadwick Boseman: Date, El expreso de Elmira, Decisión final…) le encarga la misión de atrapar a los asesinos el jefe de policía (J.K Simmons: Contrabando, La música nunca dejó de sonar, Una señal invisible…). A Davis le acompañará en la persecución la detective Frankie (Sienna Miller: Alfie, Casanova, En el límite del amor…) y gran parte de la policía neoyorquina, que por aire y tierra, está dispuesta a  atrapar a los asesinos de sus compañeros.

Con guion de Matthew Carnahan y Adam Mervis, Kirk aborda con solvencia y con buen pulso narrativo este filme, dando verosimilitud a una acción trepidante, por momentos, en las acciones de sus personajes. Aquí, destaca el afroamericano Chadwick Boseman, como protagonista de esta historia, que asume con naturalidad y determinación el mando del operativo, mostrando unas dotes sobresalientes para la interpretación, gracias también a la fotografía de Paul Cameron.

Manhattan sin escape combina dosis de suspense en la pertinaz persecución que realizan las fuerzas del orden con otras de enfrentamiento y violencia entre perseguidores y perseguidos. Con todo, unos y otros llegan a cruzar líneas rojas que solo la integridad del agente Davis no está dispuesto a pasar.

Este filme cuenta con más fuste de los habituales en este tipo de historias en los que las persecuciones de la policía a los criminales se resuelven con excesiva simpleza y con la preeminencia de las fuerzas del orden para solventar el conflicto. No es el caso de la que nos ocupa, que tiene interesantes subtramas en la relato principal, una propuesta interesante que abandera la justicia y la honestidad de algunas personas, sean de policías o criminales.