Ouija 
Público recomendado: Jóvenes
Ouija tiene todos los elementos necesarios para no acercarse a diez metros a la redonda de la sala en la que se esté exhibiendo. Su director, Stiles White, firma con ésta su primera película y hasta la fecha únicamente era conocido por trabajar en el departamento de efectos especiales del legendario Stan Winston en películas tan dispares como Parque Jurásico III, El sexto sentido, Un ratoncito duro de roer, Congo o Entrevista con el vampiro.
Paralelamente Ouija es una producción del siempre temible Michael Bay, que desde hace unos años lleva readaptando y simplificando –aún más- clásicos del terror de los 70 y 80 con resultados realmente nefastos tales como La matanza de Texas (2003), Terror en Amityville (2005), Viernes 13 (2009) o Pesadilla en Elm Street (2010). Por si fuera poco, el guión de Ouija viene firmado por el propio White y Juliet Snowden, una pareja de escritores que han redactado libretos llenos de altibajos como Boogeyman, Señales del futuro o The Possession. Esto, sumado a su muy poco estimulante trama, ponía la guinda al film. Ouija nos cuenta la predecible historia de una joven que llegó demasiado lejos con la ouija y que ahora, tras haberse suicidado, sus no muy espabilados amigos, tratan de averiguar qué fue lo que ocurrió con dramáticas consecuencias.
No obstante, vale la pena reconocerle a la película que pese a sus muy poco estimulantes credenciales, el film, al menos en su primera mitad, aguanta el tipo con moderada dignidad. Pese a la popularidad de la ouija no son excesivas las películas que han abordado este siniestro pasatiempo y aunque en la memoria del cinéfilo ahí está la imbatible sesión de ouija de Al final de la escalera, el film de White conseguirá poner nervioso a más de uno. Hay cierta templanza durante los primeros minutos de metraje, parece que no hay demasiada preocupación por aturdir al espectador a base de estruendosos efectos de sonidos (que aún así, los hay) y White juega con acierto con su cámara y con las posibilidades que le brindan la muy cuidada iluminación y el decorado.
Sin embargo, todo eso empieza a diluirse dramáticamente pasado el ecuador del film. En una película en la que su guión desprende un sospechoso tufillo a topicazo desde el primer fotograma, llegados a la mitad del metraje, el frágil interés que el largometraje había sostenido a malas penas durante poco más de media hora se esfuma rápidamente cuando comprobamos que todas las señales que nos podían hacer sospechar que quizá podíamos estar ante una historia relativamente diferente se volatilizan.
En efecto, en última instancia, todo en Ouija es más de lo mismo, sobre todo en su segunda mitad. Al final las cosas empiezan a saltar por los aires y los fantasmas se materializan en pútridas amenazas muy poco espirituales y sí muy agnósticas. Cuando termina la película uno sale con mal sabor de boca pero sobre todo con la sensación de que la gran película sobre la ouija aún está por hacer.
Ramón Monedero
Ficha técnica:
(Estados Unidos, 2014)
Dirección: Stiles White
Interpretación: Olivia Cooke (Laine), Daren Kagasof (Trevor), Douglas Smith (Pete), Bianca Santos (Isabella), Ana Coto (Sarah) y Shelley Henning (Dejbbie).
Duración: 89 min.
Distribuidora: Universal Pictures International Spain
Género: Terror.