Crítica

Público recomendado: +16

Película estrenada en plataformas

Una mujer despierta en una cámara criogénica sin tener conciencia de quién es, cómo ha llegado allí y por qué motivo… Tampoco se sabe el cuándo llegó a esa cámara -lo que supone una sorpresa interesante de la película- ni dónde se encuentra exactamente el habitáculo, un misterio que se resolverá a lo largo de la película y cuyo descubrimiento supone otro sugestivo giro. Muchas interrogaciones que responder desde el primer instante. Ah, por cierto, se está quedando sin oxígeno.

Dirigida por el director Alexandre Aja, Infierno en el agua (2019), Cuernos (2013), Reflejos (2008), Alta tensión (2003), se trata de un thriller fantástico de ciencia ficción, con la admirable interpretación de Mélani Laurent. Cuenta con reflexiones sociales y bioéticas sobre los avances científicos y sus consecuencias en la vida de las personas.

Para ser una historia claustrofóbica -la mayoría ocurre en un pequeño habitáculo donde la única protagonista está tumbada y amarrada- el ritmo y el interés del relato no decaen prácticamente en ningún momento. Uno podría esperarse que los giros resultasen artificiosos o previsibles, pero no es así. La historia, a pesar de resultar increíble en algunos aspectos, es coherente, intrigante y está bien ideada.

La relación que se crea entre la mujer y la computadora que maneja la cámara criogénica está llena de conversaciones estimulantes, y entre ambos personajes -irónicamente- se va estableciendo un trato humano y amistoso que culmina en un climax bien diseñado y de asombrosa simplicidad.

También inspiradoras las propias reflexiones de la protagonista sobre la imposibilidad -como consecuencia de los avances científicos de una sociedad avanzada- de vivir con libertad y dignidad, pues desde el comienzo ella es incapaz de tomar decisiones sobre aspectos esenciales de su propia existencia. La ciencia, que sin duda supone un avance maravilloso para el ser humano, se ha convertido en una pesadilla apocalíptica por los importantes problemas a los que no ha dado respuesta.

Película interesante, para un público joven y adulto -Netflix la recomienda para mayores de 16 años- un thriller de ciencia ficción, con algunas escenas más descarnadas, pero profundamente conmovedor. Como dijo su director la historia trata de buscar lo que verdaderamente hace humano al ser humano.