Sólo para dos 
Público recomendado: Jóvenes-Adultos
El irregular director, guionista y novelista madrileño de 46 años, Roberto Santiago (El sueño de Iván, 2011); El penalti más largo del mundo, 2005), especializado en la tosca comedia para cine y televisión fracasa con Sólo para dos, vulgar y burda comedieta sin interés en la que confunde, reiteradamente, amor con sexo bajo el pretexto de que es muy difícil aportar algo nuevo al amor.
Bajo el eufemismo “comedia romántica” se esconde Sólo para dos que es, en realidad, una fallida comedia de enredo que narra las torpes peripecias de Gonzalo (Santi Millán) y Valentina (Martina Gusman), un español y una argentina que viven en Isla Margarita y que regentan un hotel que sólo admite parejas. Después de varios años juntos, su amor atraviesa un momento de crisis, tal vez por el desgaste del tiempo o la falta de pasión. La llegada de los nuevos huéspedes, entre los que se encuentra el primer soltero que se aloja en el hotel desde que lo abrieron, pondrá a prueba su relación. El mar Caribe, los celos, las mentiras, las medias verdades, son los principales ingredientes de esta historia.
Ni en las películas españolas románticas setenteras de serie B, en las que Antonio Ozores, Fernando Esteso y Andrés Pajares se llevaban el máximo protagonismo, se ha visto hasta ahora semejante vergüenza en el cine español. Y es que Sólo para dos -es el nombre del hotel donde se centra la película- no aporta nada positivo al género, al que deja por los suelos, y con el que se repite el manido esquema de parejas infieles, justificaciones fútiles sobre el asunto, desnudos absurdos y otras vaciedades no dignas de ser reseñadas.
Sin alma ni entusiasmo, sólo con vocación de vodevil de tercera, trasnochado y simple, se extiende esta ligera comedia hasta los 95 minutos -cuando con los 10 primeros hubiera bastado-, donde el nivel interpretativo del conjunto es pésimo -sin química entre los actores (a los que algunos ni se les entiende) a consecuencia de un mal casting-, como la dirección de actores, el paupérrimo guión -de notables incoherencias narrativas- o su ambientación y puesta en escena, de la que Santiago ha sido incapaz de sacar partido. Y lo que es peor: ni un diálogo que provoque una risa no forzada o alguna idea sugerente sobre las cualidades del ser humano, de sus bondades y fragilidades.
Mediocre y barriobajera, repleta de gags que se repiten hasta el hartazgo, en Sólo para dos abunda el mal gusto y la ramplonería. Se ignora por qué una producción tan absurda y ruin tiene cabida en la cartelera española y por qué a este despropósito cinematográfico se han sumado Argentina y Venezuela. Olvidable.
José Luis Panero
Ficha técnica:
(Sólo para dos, España, Argentina, Venezuela, 2013)
Dirección: Roberto Santiago
Interpretación: Santi Millán (Gonzalo), Martina Gusman (Valentina), Nicolás Cabré (Mich), Antonio Garrido (Jayro), Dafne Fernández (Teresa), Marian Hernández (Macarena), Paula Kohan (Mariela), María Nela Sinisterra (Tania).
Duración: 95 min.
Género: Comedia romántica