La santidad. Este ha sido el tema central de las VII Jornadas de Cine Cristiano de Tarancón, organizadas por Cáritas Interparroquial y celebradas en el auditorio municipal de esta ciudad conquense. La presentación tuvo lugar el viernes 27 de octubre. Tras proyectar un avance de las películas que se verían los dos días siguientes, los asistentes pudieron disfrutar de un aperitivo mientras conversaban sobre las expectativas que habían ido surgiendo entre los aficionados a este género cinematográfico desde que se dio a conocer la cartelera. El sábado fue el turno de Mirando al cielo, la historia de José Sánchez del Río, el adolescente que entregó la vida por su fe durante la persecución religiosa desatada en México a principios del siglo XX. Y lo hizo santamente, renunciando a toda forma de violencia y perdonando a sus verdugos. El domingo, el público disfrutó de Madre Teresa: no hay amor más grande. La vida y la obra de esta monja albanesa, una auténtica santa ya en vida, están siendo investigadas en los últimos años por los directores de cine con una dedicación y profesionalidad ciertamente admirables. Es la última película documental dedicada a Madre Teresa, habiendo recibido inmejorables críticas, tanto por parte de la prensa especializada como de la propia Iglesia, con el papa Francisco a la cabeza. Al finalizar cada película hubo sendos coloquios, dirigidos y moderados por los organizadores, en los cuales intervino, como invitado especial y en calidad de experto en la materia, Alfredo Panadero, director de marketing y comunicación de European Dreams Factory, distribuidora de ambas películas.
Los alumnos de Religión católica de los colegios e institutos de la ciudad, por su parte, también tuvieron su propio momento en estas jornadas. Fue el 25 por la mañana, día en el que disfrutaron viendo Glassboy. El nuevo currículo de la asignatura, centrado en gran medida en los principios y los valores propios de la doctrina social de la Iglesia, se presta muy bien al trabajo con películas que, como ésta, hacen reflexionar sobre la necesidad de la acogida incondicional al prójimo.
Con estas jornadas, a las que han asistido cerca de 400 personas, Cáritas Interparroquial de Tarancón continúa mostrando su compromiso con la cultura cristiana. Sus voluntarios, tal y como algunos de ellos dijeron en los coloquios, están convencidos de que la caridad no se reduce a la ayuda inmediata a los más necesitados. Ellos afirman, más bien, que la caridad, como enseñó el papa Benedicto XVI, incluye el compromiso con la verdad. Y eso es lo que han querido presentar a los asistentes al auditorio, el testimonio de dos personas que, por amor a los demás, no dudaron en mostrar Quién es la Verdad. Dos ejemplos estremecedores de caridad en la verdad, es decir, de santidad.
Los beneficios íntegros de la taquilla han sido, como en todas las ediciones anteriores, para la ayuda a los más necesitados, como también lo ha sido el dinero recaudado con la venta de productos de Comercio Justo realizada en la entrada del auditorio.
Pantalla 90 es la revista digital del Departamento de Cine de la Comisión Episcopal de Medios de la Conferencia Episcopal Española. Sus orígenes se remontan a enero de 1990, cuando la revista en papel Pequeña Pantalla se fusiona con Cine 89 por razones económicas y nace una nueva que pasa a llamarse Pantalla 90, que fundó Rafaela Rodríguez Raso. Sus primeros críticos de cine fueron Pascual Cebollada, Eduardo Gil de Muro, José María Caparrós y Adolfo Blanco, a los que se añadieron Mary G. Santa Eulalia, Norberto Alcover y Gaspar Castaño.