Crítica:
Público recomendado: adultos
John Rambo es excarcelado a condición de ayudar al Gobierno en una misión de rescate de unos soldados americanos en Vietnam. Tras aceptar, es lanzado sobre el terreno sin provisiones ni armas de fuego tras lo que le ordenan inesperadamente que se limite a hacer fotografías de reconocimiento. Pero Rambo se niega a dejar allí a sus compañeros…
Segunda parte de la famosa película Acorralado, que dos años antes redefinió el concepto de cine de acción y persecuciones pues se posicionó de parte del perseguido y no de la justicia. Ahora vuelve sobre esa idea siendo los vietnamitas el cruel enemigo que acosa y persigue a Rambo. En este sentido, y pese a quedar por debajo de la primera entrega, es una cinta trepidante, violenta e icónica.
VISIÓN DEL HOMBRE Y TRATAMIENTO DEL HECHO RELIGIOSO
Hay una crítica moral en todo el trasfondo argumental de la saga Rambo, un ataque contra los que se olvidaron de los hombres que habían luchado por sus libertades y que apunta, directamente, a la Administración Reagan, y que posa su mirada sobre un hecho ahora muy tratado en el cine, y es que esos hombres convertidos en máquinas de matar se quedan destrozados de por vida.