Generic selectors
Exact matches only
Search in title
Search in content
Post Type Selectors

Un hombre solitario

Un hombre solitario 

Público recomendado: Adultos

Tomando como modelo A propósito de Henry (1991), de Mike Nichols, numerosas películas de las últimas tres décadas, sobre todo de Hollywood, han criticado abiertamente el modelo yuppie de triunfo a cualquier precio, caracterizado por un individualismo feroz y un hedonismo enfermizo. Michael Douglas ha interpretado ese patético tipo humano al menos en Wall Street (1987) y Wall Street. El dinero nunca duerme (2010), ambas de Oliver Stone, y en Instinto básico (1992), de Paul Verhoeven. Ahora vuelve a encarnarlo en Un hombre solitario, intenso drama con el que los guionistas Brian Koppelman y David Levie dan continuidad a su carrera como directores tras la pasable Ajuste de cuentas.

El neoyorquino Ben Kalmen (Michael Douglas), ex dueño de una popular cadena de concesionarios, se niega a asumir que ya ha cumplido sesenta años. Hace seis, el médico le detectó un problema cardiaco grave, pero él no quiso hacerse las pruebas, se divorció de su esposa Nancy (Susan Sarandon), se alejó de la hija de ambos, Susan (Jenna Fischer), y se dedicó a seducir a mujeres y jovencitas, darse la buena vida y hacer trapicheos financieros, que le llevaron al borde de la cárcel. Ahora está con Jordan (Mary-Louise Parker), hija de un magnate de la industria automovilística, que intenta ayudarle. Sin embargo, Ben sigue tomando decisiones equivocadas, como acompañar a la hija de Jordan, Allyson (Imogen Poots), a la Universidad de Boston donde él mismo estudió. Allí, su carrera profesional y su vida personal se irán derrumbando de forma acelerada e imparable.

Una buena parte de esta película resulta incómoda y desagradable, pues muestra de un modo descarnado y un tanto ambiguo el amoral estilo de vida del protagonista y sus reiterativas andanzas sexuales, alguna cercana al incesto. Pero, en su recta final, el guion afina su punto de mira ético, machaca al penoso Ben y acaba proponiendo un certero elogio del dominio de sí, la madurez afectiva, la familia y la amistad. Todo esto implica al espectador gracias a las sólidas interpretaciones de todo el reparto, especialmente de Michael Douglas, que vuelve a bordar su arquetipo. Menos elogios merece el guion —un tanto episódico, esquemático y abrupto en sus elipsis—, así como la puesta en escena, más bien rutinaria y convencional. En todo caso, tiene interés esta nueva constatación de las raíces morales de la crisis económica y social que ahora sufren las sociedades occidentales.

Jerónimo José Martín

 

Ficha técnica:

Directores: Brian Koppelman y David Levien

Intérpretes: Michael Douglas, Susan Sarandon, Jesse Eisenberg, Mary-Louise Parker, Danny DeVito, Imogen Poots, Jenna Fischer, Richard Schiff.

E.UU. 2009.

Géneero: Drama

Duración: 90 min

Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Ver
Privacidad