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Misión Imposible: Sentencia mortal – Parte 1.

Crítica

Público recomendado: +13

Continúa la saga de Misión Imposible, ese agente clandestino llamado Ethan Hunt (Tom Cruise) que, con su equipo siempre fiel del FMI, se enfrentan a los peores enemigos para salvar el mundo. En este caso se trata de la primera parte de la séptima entrega; todo un ejercicio de entretenimiento inverosímil, pero con una gran calidad técnica y artística. Un guion bien trabajado y, sobre todo, unos personajes creados con matices que evolucionan y muestran “su corazón” a la hora de decidir qué es el bien y qué es el mal. Interesante el villano, un todopoderoso enemigo que se va descubriendo, poco a poco, astuto, frío, calculador, muy sibilino.

Esta primera parte tiene una duración de más de dos hora y media. Aun así, la película no hace aguas en ningún momento, logran mantener las tramas vivas y entrelazadas; aunque es verdad que se hace larga en su parte central. Vale la pena destacar los giros de guion provocados por la naturaleza del enemigo; sorpresas narrativas que dan más profundidad a los conflictos y llenan de riqueza unos personajes que normalmente adolecen de ser planos y con cuestionables motivaciones.

En este caso, director y guionista (Chritopher McQuarrie) logra una unidad interesante más allá de la experiencia de entretenimiento. McQuarrie fue también director de otras entregas de la saga de Misión Imposible y guionista de Top Gun: Maverik (2022), Al filo del mañana (2014) o Sospechosos Habituales (1995). En este caso, coescribe con Erik Jendresen (Hermanos de Sangre) logrando un guion notable que mezcla con inteligencia varias tramas con un antagonista onmipresente, cuya mera presencia y astucia, realmente atemoriza. Debe citarse la especial relación profesional entre McQuarrie y Tom Cruise que, desde hace unos años, comparten proyectos a petición del actor, según parece.

El tono de la película recuerda a la comicidad de Marvel. Los diálogos y situaciones cómicas parecen más frecuentes recordando al tono de Guardianes de la Galaxia. Por otro lado, también evoca al Batman de Nolan, especialmente en su tercera entrega, en el personaje de Catwoman. El arco de transformación de ciertos personajes y la fe férrea de Ethan Hunt en la bondad y confianza de las personas, juegan un tándem muy interesante y profundo. Vale la pena destacar la interpretación de la canadiense Pom Klementieff (Guardianes de la Galaxia, en el personaje empático de Mantis, la de las antenas). En este caso, nos muestra un registro muy diferente, que contrasta muy bien con el tono general de obra. Fabulosa también Rebeca Ferguson, una estupenda actriz de acción con mucho potencial.

En cuanto a la temática del film, debemos decir que logra adentrarse en algunos asuntos, aunque sin profundizar mucho. Por un lado, tenemos los cambios que nuestro mundo está sufriendo, desde un punto de vista tecnológico y el “determinismo virtual” que implica; en este punto evoca a 2001, Odisea en el Espacio, la saga de Terminator o incluso la profética Wall-e, con aquel piloto automático tan autónomo. Atención con la cercanía a nuestro nuevo estilo de vida moderno, marcado por el uso de las redes sociales, de algoritmos que tratan de estudiarnos y de la pérdida de lo analógico y más tradicional. Y, por otro lado, se nos deja ver ciertos aspectos de la naturaleza humana, concretamente la película aboga a que somos mucho más que algo medible por un algoritmo. La naturaleza humana, aunque tenga toneladas de basura ideológica encima, aun conserva intactas las grandes preguntas sobre el sentido de la vida y su valor.

Desde un punto de vista simbólico se podría señalar que el protagonista tiene un punto martirial-crístico cuestionable. Ethan Hunt siempre termina siendo el único que puede salvar el mundo, al mismo tiempo que es etiquetado como el peor enemigo a buscar; y finalmente, su misión implica la entrega incluso de su propia vida. Esta aceptación natural de su misión, parece una vocación que va más allá del mero héroe convencional.

En definitiva, la saga de Misión Imposible logra revitalizar con acierto la historia de Ethan Hunt, ofreciendo una estupenda película de acción, con situaciones increíbles y un cierto mensaje en su interior. Algo larga pero no pesada. Incluso te quedas con ganas de esa segunda parte que parece que promete. Si gustan del cine de James Bond o Jack Ryan, no se la pierdan.

Carlos Aguilera Albesa

https://www.youtube.com/watch?v=XoDmKCZBeeI

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