Crítica
Público recomendado: +12
Seguro que más de uno habrá confundido la nueva película de Robert De Niro, Todo sobre mi padre, con la saga de Los padres de ella, Los padres de él y Ahora los padres son ellos, dirigida por Jay Roach (la tercera entrega por Paul Weitz) e interpretada por Robert de Niro y Ben Stiller. A mí misma me pasó, pero a pesar del parecido razonable, no tienen nada que ver.
Todo sobre mi padre es una divertida comedia que narra la primera vez que se conocen los padres de Sebastian y de su novia Ellie. El padre de él, interpretado por De Niro es Salvo, un peluquero que se ha labrado su futuro a base del esfuerzo como inmigrante en Estados Unidos, de origen siciliano, mientras que los padres de Ellie provienen de la clase alta de Washington DC y son los propietarios de una prestigiosa cadena de hoteles.
El choque de clases desemboca en hilarantes y casi surrealistas escenas asegurando las risas del espectador. No es de lo más original, pero he de reconocer que, a pesar de las altas dosis de azúcar y superficialidad, te lo pasas bien viendo la película e incluso se puede aprender algo: en las familias políticas, como en la vida, a las personas hay que aceptarlas como son, con sus extravagancias y peculiaridades.
“La familia no es solo lo más importante, la familia lo es todo”: este antiguo proverbio siciliano es la premisa de vida del peluquero, quien ha educado a su hijo en los más estrictos valores tradicionales del esfuerzo y la austeridad. Hay algo que prevalece en esta historia que realmente la embellece: el valor de las tradiciones, la perpetuidad de los valores familiares, la importancia de la originalidad y el sentido de conservar la autenticidad de cada persona y de cada familia.
En cuanto al guion, podemos apuntar que es una historia divertida, creativa y amable desde el punto de vista cómico, con matices temáticos interesantes, pero los diálogos, la puesta en escena y la interpretación se hace dejan mucho que desear… Conversaciones previsibles, personajes muy estereotipados, planos y encuadres demasiado automatizados… Sin duda, lo mejor de la cinta es la visión que aporta de las relaciones paternofiliales y el punto cómico desde el que lo trata.
Después de su intervención en Una terapia peligrosa (Harold Ramis, 1999) y su secuela (2002), o de su brillante aportación a la trilogía iniciada con Los padres de ella, Robert De Niro no elige bien sus debuts, especialmente en las comedias que últimamente asume: En guerra con mi abuelo, La última gran estafa o El padre de la novia parte 3, nada que ver con su talento para las cintas de Martin Scorsese… Pronto volveremos a disfrutar de su talante más dramático en Los asesinos de la luna, prevista para octubre de 2023. Kim Cattrall (Sex and the city, The ghost writer) es un soplo de aire fresco en el elenco frente a los fantoches “made in Hollywood” como los hermanos de la novia (Anders Holm y Brett Dier) o incluso Leslie Bibb, la afamada protagonista.
Rosa Díe
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